jueves, 3 de enero de 2013

Dimensiones Malditas. Capítulo 10.


CAPÍTULO 10:ENTRENAMIENTO

 La princesa Aurora caminaba felizmente por el bosque, jugaba con sus amigos, olvidando un poco la vida de reina, aunque era muy feliz con Felipe, le agobiaba tener que encargarse del reino de su padre, no creía estar preparada para aquello.
 Preferiría seguir con sus tías, como campesina, pero con el hombre al que amaba. De pronto, una enigmática luz interrumpió sus pensamientos. La luz empezó a tomar forma, y su mayor sueño se tornó pesadilla.
-Aurora: ¡Maléfica!
-Maléfica: ¡Querida Aurora, cuánto tiempo sin verte!
-Aurora: ¿Qué haces aquí?
-Maléfica: Tranquila querida, no estoy aquí por ti.
La bruja miró hacia otra dirección y empezó a reír.


La joven Elena se despertó asustada, había sido una pesadilla terrible, pero no solo eso, se tocó el labio y observó que un hilito de sangre caía conjuntamente con sus lágrimas.
Al día siguiente, ella y su "amigo", Taron, decidieron ir a ver al viejo Dallben, tal vez podía ayudarla a entender aquel sueño.
-Taron: No te alteres Elena, estoy seguro de que solo fue una pesadilla sin importancia.
-Elena: Yo no estoy tan segura, Taron. Esas imágenes me resultaban familiares.
Elena le explicó a Taron porqué conocía a esa chica, según parece tenía relación con un cuento que su madre le contó de pequeña. Un cuento sobre una princesa, una rueca, y un beso de amor verdadero.
A Taron le sorprendió aquel cuento, pero eso no hacía que se tuvieran que preocupar por aquel sueño.
De todas formas, fueron a casa de Dallben, el viejo hizo que la princesa tomase una infusión que calmaría su sueño. De paso, pudieron ver a sus viejos amigos: Gurgi y Hen.
 Al volver al castillo, descubrieron que todo había cambiado, no parecía el mismo castillo donde ahora vivían Taron y Elena.
¿?: Por fin aparecéis.
Taron y Elena se asustaron al reconocer aquella voz tan terrible, sin ninguna duda se trataba del rey del mal.
 El rey del mal, acompañado de Maléfica irrumpió en la sala.
Taron: No puedo creer que estés vivo.
El muchacho se armó con lo que pudo y atacó al malvado ser.
-Maléfica: Bueno, princesa, ha llegado el momento de que hablemos a solas.
 Justo cuando Taron se disponía a atacar, una increíble cantidad de humo se forma, haciendo desaparecer a Maléfica y a Elena dejando en su lugar la espada mágica que una vez perteneció a Taron.
Cuando la vio el muchacho se emocionó.
-Rey del mal: Veo que te ha gustado, aquellas brujas cabezonas no nos querían dar la espada ni el caldero negro. Por suerte, fue fácil eliminarlas.
-Taron: ¿Por qué me cuentas todo esto? ¿Por qué me das la espada?
-Rey del mal: No he conseguido hacer funcionar el caldero, por eso, tú entrarás en él, y un nuevo ejército de guerreros inmortales me permitirá dominar el mundo.
-Taron: Rey estúpido, cuando Gurgi entró en el caldero selló para siempre sus poderes, no podrás usarlo para tus propósitos.
 Mientras, en el inframundo, Hades, Naraku y Orochimaru escuchaban la conversación.
-Hades: Parece que el muchacho sabe lo que dice.
-Naraku: En ese caso, el rey del mal no sirve para nada.
 -Orochimaru: Dejemos que ese muchacho practique un poco con su espada.
Una joven observaba asustada a sus jefes.
-Mégara: ¿Queréis decir que vais a matar a dejar morir a vuestro compañero?
-Hades: ¿Qué le vamos a hacer? Él es prescindible, ahora ve a cumplir tu cometido.
Mientras, en otra sala del castillo...
-Maléfica: ¿Qué podría hacer contigo? ¿Destruirte? ¿Encogerte? ¿Convertirte en rana?
-Elena: ¡Haz lo que quieras conmigo, pero ni se te ocurra tocar a Taron!
-Maléfica: Tienes valor, no te pareces en nada a lo que una vez fuiste.
Justo cuando Maléfica iba a atacar a Elena, la voz de Orochimaru la detuvo.
 Estaba comunicándose con ella a través de la técnica de resurrección de ultratumba.
-Orochimaru: Márchate Maléfica.
-Maléfica: Pero, la chica...
-Orochimaru: Tranquila, tu misión ha terminado, has ganado. Aún no ha llegado el momento de eliminar a la muchacha.
-Maléfica: ¿Y el rey del mal?
 -Orochimaru: Él morirá, no le necesitamos. ¡Vamos, vete!
Efectivamente, mientras la bruja escapaba, Taron introducía su espada en el cuerpo del malvado rey del mal, que empezó a retorcerse. Orochimaru anuló el sello maldito con él y desapareció por completo, dejando solo a Taron con la espada, la cual empezó a brillar, había adquirido un nuevo poder.

El joven Hércules entrenaba junto a su maestro, aspirando a convertirse en el héroe más poderoso de todos. Pero durante el entrenamiento aparecieron unos monstruos, y un enemigo terrible, Jafar.
Hércules no podía creer lo que veía, pero lo único que podía hacer era derrotarlo. Hércules y Jafar tuvieron una dura batalla, pero finalmente, el aprendiz de héroe venció. 
Hércules decidió ir a avisar a Aladdín sobre lo que había ocurrido, pero un adversario mucho peor que el hechicero estaba a punto de aparecer.
-Mégara: Hola fortachón.

CONTINUARÁ

2 comentarios:

  1. Su "amigo" Taron xD .... ¡ÑEEEE JAJAJA XD! Todos sabemos que se aman, ¿por qué les cuesta admitirlo xD?
    ¡AHHH! ¡MALÉFICA ES UNA BITCH (en español suena muy feo xD) COMPLETA! Ay, menos mal que no mató a Elena o me hubiera deprimido gravemente O.o.... ¡ESTO TARON! ¡QUE MUERA, QUE MUERA!
    ...Wow, espera un momento x3...
    Entonces... ¿Mégara y Hércules aún no se conocían O.O? O sea, o sea... Ohhhhhhhh O.O Ya entendí x3
    ¡MEGARA NOOOOOOOOOOO! ¡NO LE HAGAS NADA A HÉRCULES! ¡WAAAAA >.<!
    Haku, cada vez me gusta más :D ¡Está demasiado interesante <3! ¡Me encanta x3! El domingo seguiré leyendo, ya que en las noches es dónde aprovecho para leer y mañana estaré toda la noche fuera O.o....

    XOXO y más XOXO

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Tengo la intención de que esta pareja mejore la relación de una manera que no esperáis, pero seguro que os encanta. Maléfica fue una villana muy desaprovechada en su película, pretendo hacerla digna de su título "emperatriz del mal".
      No, Megara y Hércules no se conocen. Quería ver a este personaje con su diseño joven (de hecho, Meg no iba a salir en la serie original) pero pensé que de esta forma podría empezar de 0 esta magnífica historia de amor, y no podía desaprovechar esta oportunidad.

      Eliminar